jueves, 30 de junio de 2011

YOGA TIBETANO


El yoga tibetano, también conocido como Los Cinco Ritos Tibetanos, se trata de una kriya de 5 sencillos ejercicios.
Dícen que esta serie guarda el secreto de la juventud, equilibrando los chakras y despertando la energía Kundalini.
Cada ejercicio ha de repetirse 21 veces o si lo deseas puedes comenzar haciendolos durante 1 minuto o minuto y medio.

martes, 28 de junio de 2011

EL TIGRE QUE BALABA

 
  Al atacar a un rebaño, una tigresa dio a luz y poco después murió. El cachorro creció entre las ovejas y llegó él mismo a tomarse por una de ellas, y como una oveja llegó a ser considerado y tratado por el rebaño.
Era sumamente apacible, pacía y balaba, ignorando por completo su verdadera naturaleza. Así transcurrieron algunos años.
  Un día llegó un tigre hasta el rebaño y lo atacó. Se quedó estupefacto cuando comprobó que entre las ovejas había un tigre que se comportaba como una oveja más. No pudo por menos que decirle:
  --Oye, ¿por qué te comportas como una oveja, si tú eres un tigre?
  Pero el tigre-oveja baló asustado.
Entonces el tigre lo condujo ante un lago y le mostró su propia imagen.
Pero el tigre-oveja seguía creyéndose una oveja, hasta tal punto que cuando el tigre recién llegado le dio un trozo de carne ni siquiera quiso probarla.
  --Pruébala -le ordenó el tigre.
  Asustado, sin dejar de balar, el tigre-oveja probó la carne. En ese momento la carne cruda desató sus instintos de tigre y reconoció de golpe su verdadera y propia naturaleza.
 
 
  *El Maestro dice: El ser humano común está tan identificado con la burda máscara de su personalidad y su ego que desconoce su genuina y real naturaleza.

viernes, 24 de junio de 2011

LOS YUGAS

Los estados espirituales de la civilización en cada iugá
En la tradición hinduista, el mundo pasa por un continuo ciclo de estas épocas. Cada satiá-iugá se va degradando hasta convertirse en kali-iugá; luego viene una etapa de renacimiento que no se describe en las Escrituras, y comienza otro satiá-iugá seguida de otra fase descendente y así continuamente.
El descenso de satiá-iugá a kali-iugá está asociado a un progresivo deterioro del dharma (‘deber religioso’), manifestado en un decrecimiento en la duración de la vida del ser humano y la calidad de los estándares de la moral humana.

 Satya yuga

El satiá-iugá es la primera de las edades del mundo.
Satiá-iugá en total dura 4800 años: la era propiamente dicha 4000 años, el comienzo (amanecer) 400 años y el final (atardecer) otros 400 años.
Estos son 4800 años de los hombres, aunque según el hinduismo posterior  son 4800 años de los dioses (que equivaldrían a 1.728.000 años de los hombres).
El método de liberación espiritual en esta primera era es dhiana (‘meditación’).
En este iugá más elevado, todas las personas puede experimentar la espiritualidad por intuición directa. El velo entre los reinos de lo material y lo transcendental se vuelve casi transparente. De acuerdo con el Natia Shastra, no hay presentaciones de natiá (danza) en el satiá-iugá porque es un periodo libre de cualquier tipo de infelicidad o miseria. Satiá-iugá es también llamado la Era Dorada o Edad de Oro.

 Tretā yuga

En el tréta-iugá, el método de liberación espiritual es el iagñá (‘sacrificio de animales en un altar’).
Se dice que la guerra descrita en el Rāmāiaṇa sucedió en tréta-iugá


 Dvāpara yuga
En duapára-iugá, el método de liberación espiritual es archana (‘adoración [de ídolos]’).
En sánscrito, dvā-pára significa ‘el lado del dado marcado con dos puntos’ y por antonomasia: ‘dos’ o ‘segundo’. Entonces dvā-pára yuga significa ‘segunda era’ o ‘la era con el número dos’. Sin embargo esta era es la tercera (después de tréta) ya que el orden de las cuatro eras se trastocó en esta época en particular, y la ‘tercera era’ (tretá) vino antes que la ‘segunda era’. La era en total dura 2400 años: la era propiamente dicha 2000 años, el comienzo (amanecer) 200 años y el final (atardecer) 200 años.
El fin de esta era está relacionado con la muerte del dios Krishná, y los sucesos descritos en el Majábharata.


 Kali yuga
El método de liberación espiritual es dāna (‘dar’ caridad).
Igualmente, las escrituras Védicas recomiendan para esta era:
'Harer nama, harer nama, harer namaiva kevalam / Kalau nasty eva, nasty eva, nasty eva gathir anyhata
"Cantar el nombre de Hari, Cantar el nombre de Hari, Cantar el nombre de Hari es el principal medio de alcanzar liberación espiritual en la era de Kali, no hay otra manera, no hay otra manera, no hay otra manera".
Es decir, el canto de los Santos Nombres de Dios, de forma colectiva (kirtan) o individual (japa) son las únicas maneras de alcanzar la liberación del espíritu de la contaminación material provocada por la riña e hipocresía que caracterizan a esta Era.
En el Vishnú puraná, kali-iugá se describe así:
En el kali-iugá, habrán numerosos gobernantes luchando por el poder entre ellos. Ellos no tendrán carácter. La violencia, las mentiras y la inmoralidad estarán a la orden del día. La piedad y la naturaleza del bien se desvanecerán lentamente. La pasión y la lujuria serán la única atracción entre los sexos. Las mujeres serán objetos de placer sexual. La mentira será la línea límite de subsistencia. La gente culta será ridiculizada y puesta en vergüenza; en el mundo la ley del más rico sera la única ley.
Literalmente kali significa ‘el lado del dado marcado con un uno’. No se debe confundir con la diosa Kālī, fundamental en el hinduismo.

 Mahā yuga

Estos cuatro iugás juntos (satiá, treta, duapara y kali) completan un majā-iugá (‘gran era’).
Una sucesión de 71 majaiugás completan un manuantara (‘intervalo de Manu’), la vida de un patriarca Manu. Al final de cada manuantara hay un periodo igual de tiempo (71 majáiugas) durante el cual el «mundo» (que puede ser este planeta o el universo entero) es inundado; entonces el ciclo comienza de nuevo.

Las enseñanzas de Sri Yukteswar

Artículo principal: La_ciencia_sagrada
El escritor hindú Sri Yukteswar Giri tenía una interpretación diferente del ciclo de iugás, que lograba explicar la incoherencia de las doctrinas hindúes con la realidad que se vivía en su época (principio del siglo XX). Se supone que en kali-iugá debería haber menos longevidad y menos desarrollo del conocimiento, y más machismo, crímenes de odio, etc. Para eliminar esa incoherencia, en su libro La ciencia sagrada, él sostuvo con cálculos matemáticos que no estamos en kali-iugá. Según el autor, el kali yuga comprende un periodo de 1000 +200 años, dwarpa yuga 2000 +400, tetra yuga 3000 +600 y satya yuga 4000 + 800. A cada yuga le corresponden dos fases de transición, por ejemplo 100 + 1000 + 100.
Si representamos las yugas en un reloj, la época espiritual más baja serían las 6 del reloj, hacia al año 1.000 d.c., el centro de Kali Yuga (más o menos la Edad Media), y el punto más alto en las 12 del reloj es el centro de Satya Yuga (literalmente Edad de la Verdad; sat=verdad) o Edad de Oro. Tardamos unos 12.500 años desde el punto más bajo al más alto, y unos 25.000 en la vuelta completa en el sentido del reloj. Actualmente estaríamos a las 7 y ascendiendo en Dwapara Yuga o Edad de Bronce.


martes, 21 de junio de 2011

EL VIAJERO SEDIENTO

  Lentamente, el sol se había ido ocultando y la noche había caído por completo. Por la inmensa planicie de la India se deslizaba un tren como una descomunal serpiente quejumbrosa.
Varios hombres compartían un departamento y, como quedaban muchas horas para llegar al destino, decidieron apagar la luz y ponerse a dormir. El tren proseguía su marcha. Transcurrieron los minutos y los viajeros empezaron a conciliar el sueño. Llevaban ya un buen número de horas de viaje y estaban muy cansados. De repente, empezó a escucharse una voz que decía:
  --¡Ay, qué sed tengo! ¡Ay, qué sed tengo!
  Así una y otra vez, insistente y monótonamente. Era uno de los viajeros que no cesaba de quejarse de su sed, impidiendo dormir al resto de sus compañeros. Ya resultaba tan molesta y repetitiva su queja, que uno de los viajeros se levantó, salió del departamento, fue al lavabo y le trajo un vaso de agua. El hombre sediento bebió con avidez el agua. Todos se echaron de nuevo. Otra vez se apagó la luz. Los viajeros, reconfortados, se dispusieron a dormir. Transcurrieron unos minutos. Y, de repente, la misma voz de antes comenzó a decir:
  --¡Ay, qué sed tenía, pero qué sed tenía!
 
 
  *El Maestro dice: La mente siempre tiene problemas. Cuando no tiene problemas reales, fabrica problemas imaginarios y ficticios, teniendo incluso que buscar soluciones imaginarias y ficticias.

lunes, 20 de junio de 2011

EL COOLI DE CALCUTA

 
  Un buscador occidental llegó a Calcuta. En su país había recibido noticias de un elevado maestro espiritual llamado Baba Gitananda. Después de un agotador viaje en tren de Delhi a Calcuta, en cuanto abandonó la abigarrada estación de la ciudad, se dirigió a un cooli para preguntarle sobre Baba Gitananda. El cooli nunca había oído hablar de este hombre.
El occidental preguntó a otros coolíes, pero tampoco habían escuchado nunca ese nombre. Por fortuna, y finalmente, un cooli, al ser inquirido, le contestó:
  --Sí, señor, conozco al maestro espiritual por el que preguntáis.
  El extranjero contempló al cooli.
Era un hombre muy sencillo, de edad avanzada y aspecto de pordiosero.
  --¿Estás seguro de que conoces a Baba Gitananda? -preguntó, insistiendo.
  --Sí, lo conozco bien -repuso el cooli.
  --Entonces, llévame hasta él.
  El buscador occidental se acomodó en el carrito y el cooli comenzó a tirar del mismo. Mientras era transportado por las atestadas calles de la ciudad, el extranjero se decía para sus adentros: “Este pobre hombre no tiene aspecto de conocer a ningún maestro espiritual y mucho menos a Baba Gitananda. Ya veremos dónde termina por llevarme”.
  Después de un largo trayecto, el cooli se detuvo en una callejuela tan estrecha por la que apenas podía casi pasar el carrito. Jadeante por el esfuerzo y con voz entrecortada, dijo:
  --Señor, voy a mirar dentro de la casa. Entrad en unos instantes.
  El occidental estaba realmente sorprendido. ¿Le habría conducido hasta allí para robarle o, aún peor, incluso para que tal vez le golpearan o quitaran la vida? Era en verdad una callejuela inmunda. ¿Cómo iba a vivir allí Baba Gitananda ni ningún mentor espiritual? Vaciló e incluso pensó en huir. Pero, recurriendo a todo su coraje, se decidió a bajar del carrito y entrar en la casa por la que había penetrado el cooli. Tenía miedo, pero trataba de sobreponerse. Atravesó un pasillo que desembocaba en una sala que estaba en semipenumbra y donde olía a sándalo. Al fondo de la misma, vio la silueta de un hombre en meditación profunda. Lentamente se fue aproximando al yogui, sentado en posición de loto sobre una piel de antílope y en actitud de meditación.
!Cuál no sería su sorpresa al comprobar que aquel hombre era el cooli que le había conducido hasta allí! A pesar de la escasa luz de la estancia, el occidental pudo ver los ojos amorosos y calmos del cooli, y contemplar el lento movimiento de sus labios al decir:
  --Yo soy Baba Gitananda. Aquí me tienes, amigo mío.

domingo, 19 de junio de 2011

NI TÚ NI YO SOMOS LOS MISMOS (Cuento clásico de la India)

 
  El Buda fue el hombre más despierto de su época. Nadie como él comprendió el sufrimiento humano y desarrolló la benevolencia y la compasión. Entre sus primos, se encontraba el perverso Devadatta, siempre celoso del maestro y empeñado en desacreditarlo e incluso dispuesto a matarlo.
Cierto día que el Buda estaba paseando tranquilamente, Devadatta, a su paso, le arrojó una pesada roca desde la cima de una colina, con la intención de acabar con su vida. Sin embargo, la roca sólo cayó al lado del Buda y Devadatta no pudo conseguir su objetivo. El Buda se dio cuenta de lo sucedido permaneció impasible, sin perder la sonrisa de los labios.
Días después, el Buda se cruzó con su primo y lo saludó afectuosamente.
Muy sorprendido, Devadatta preguntó:
  --¿No estás enfadado, señor?
  --No, claro que no.
  Sin salir de su asombro, inquirió:
  --¿Por qué?
  Y el Buda dijo:
  --Porque ni tú eres ya el que arrojó la roca, ni yo soy ya el que estaba allí cuando me fue arrojada.
 
 
  *El Maestro dice: Para el que sabe ver, todo es transitorio: para el que sabe amar, todo es perdonable.

jueves, 16 de junio de 2011

LAS PESCADORAS

 
  Se trataba de un grupo de pescadoras. Después de concluida la faena, se pusieron en marcha hacia sus respectivas casas. El trayecto era largo y, cuando la noche comenzaba a caer, se desencadenó una violenta tormenta.
Llovía tan torrencialmente que era necesario guarecerse. Divisaron a lo lejos una casa y comenzaron a correr hacia ella. Llamaron a la puerta y les abrió una hospitalaria mujer que era la dueña de la casa y se dedicaba al cultivo y venta de flores. Al ver totalmente empapadas a las pescadoras, les ofreció una habitación para que tranquilamente pasaran allí la noche.
Era una amplia estancia donde había una gran cantidad de cestas con hermosas y muy variadas flores, dispuestas para ser vendidas al siguiente día.
Las pescadoras estaban agotadas y se pusieron a dormir. Sin embargo, no lograban conciliar el sueño y empezaron a quejarse del aroma de las flores: “!Qué peste! No hay quien soporte este olor. Así no hay quien pueda dormir”. Entonces una de ellas tuvo una idea y se la sugirió a sus compañeras:
  --No hay quien aguante esta peste, amigas, y, si no ponemos remedio, no vamos a poder pegar un ojo. Coged las canastas de pescado y utilizadlas como almohada y así conseguiremos evitar este desagradable olor.
  Las mujeres siguieron la sugerencia de su compañera. Cogieron las cestas malolientes de pescado y apoyaron las cabezas sobre ellas. Apenas había pasado un minuto y ya todas ellas dormían profundamente.
 
 
  *El Maestro dice: Por ignorancia y ausencia de entendimiento correcto, el ser humano se pierde en las apariencias y no percibe lo Real.

KRISHNA MUESTRA A MADRE YASODA EL UNIVERSO EN SU BOCA

Un día mientras Krishna estaba jugando con Sus pequeños compañeros de juegos y Balarama, todos Sus amigos se unieron a Balarama y  presentaron una queja a madre Yasoda.  "Madre," sugirieron ellos, "Krishna  ha comido tierra."
Después de oír esto de los compañeros de Krishna, madre Yasoda, quien siempre estaba llena de ansiedad sobre el bienestar de Krishna,  Lo cogió y miró dentro de Su boca y castigarLo.  Con ojos temerosos, le habló a su hijo de la siguiente manera:  "Querido Krishna, ¿por qué eres tan inquieto que  has comido tierra en un lugar solitario?"
El Señor Krishna replicó, "Mi querida Madre, Yo nunca he comido tierra.  Todos Mis amigos que se quejaron contra Mí son mentirosos.  Y si tu piensas que ellos han sido sinceros, tu puedes mirar directamente en Mi boca y examinarla."
Madre Yasoda retó a Krishna: " Si Tú no has comido tierra, entonces abre bien Tu boca."
Cuando Krishna fue ordenado por Su madre, Él inmediatamente abrió Su boca como un niño común.  Entonces madre Yasoda vio en Su boca la completa opulencia de la creación.  Ella vio el espacio exterior en todas las direcciones, montañas, islas, océanos, mares, planetas, aire, fuego, luna y estrellas.  En efecto, madre Yasoda vio dentro de la boca de su niño todo lo necesario de la manifestación cósmica.  Viendo todo esto, ella se sobrecogió de terror y se preguntó si ella estaba soñando o realmente vio algo extraordinario.
Entonces el Señor Krishna expandió Su energía interna, y Yasoda olvidó toda especulación filosófica y aceptó a Krishna una vez más como su propio hijo.

Los tres mantras imprescindibles en una clase de kundalini yoga

Imagen: Manual de meditación "Medita y sé feliz"

Adi mantra

Ong Namo Guru Dev Namo

El adi mantra es la primera tecnología de un estudiante o maestro de Kundalini yoga. Es una meditación. Es un estado de conciencia. Es el enlace entre tú como persona finita y tú como flujo de la Conciencia Infinita que guía la energía Kundalini. Siempre se empieza una clase o práctica con este mantra.
Se utiliza como un enlace en cualquier momento que se esté enseñando Kundalini Yoga. Cuando cantas Ong Namo, te conectas con la Cadena Dorada y el Cuarto Éter, y tu "Ser" se disuelve para que puedas servir mediante ese flujo. Cuando cantas el Adi Mantra completo permaneces inmerso en la relación para que puedas recibir guía personal.
Practica este mantra para volverte un maestro de la capacidad, para poner a un lado tus propios medios, orgullo, expectativas y manipulaciones. Deja que que el eslabón de conciencia te toque y enseña a través de tí.

Su significado:
Me postro ante la sabiduría divina sutil, el maestro divino interior.

El eterno sol

Que el eterno Sol te ilumine, el amor te rodee, y la luz pura interior, guie tu camino.

Este mantra se canta al finalizar una práctica de Kundalini Yoga.
Se trata de un canto compuesto por un grupo americano llamado Rainbow Spirit Oregon, en la época hippie. 

Sat nam

Este mantra se canta inmediatamente después de cantar El Eterno Sol.

También es muy utilizado durante los ejercicios de yoga, recitado mentalmente para aumentar la concentración del practicante.
Sat significa verdad, la realidad de la existencia propia. Naam significa la identidad o el nombre. 

Es un Bij mantra (mantra semilla). Dentro de la semilla está contenido todo el conocimiento del árbol ya crecido. La esencia o semilla es la identidad de la verdad incorporada de una manera condensada. Cantar este mantra despierta el alma y te guía hacia tu destino. Este mantra equilibra los cinco elementos.


miércoles, 15 de junio de 2011

DEVAKI

Es hija de Devaka, el hermano menor del rey Ugrasena de Mathurā. Según el Jari vaṃśa, ella es una encarnación parcial de Áditi (la madre de los devás). El Matsya puraná también la identifica con la diosa Dakshaianí (la esposa del dios Shivá).
El sabio Nárada Muni, que fue el encargado de desencadenar el advenimiento de Krishná, visitó al malvado rey Kamsa, durante el casamiento de su prima Devakí con Vasudeva, y le advirtió que sería asesinado por un hijo de ella. Entonces Kamsa encarceló a la pareja. Cuando estos tuvieron su primer hijo, Kamsa llegó a la mazmorra y lo asesinó. Entonces Vasudeva y Devaki comenzaron a tener un hijo tras otro, y Kamsa se los fue matando. El séptimo, Balarama, escapó de la muerte al ser transferido desde el útero de Devakī al de Rójini (otra esposa de Vasudeva, que vivía en Gokula), mientras que una niña (encarnación de Yoga Maia) fue transferida al útero de Iashodá (amiga de Rójini).
Finalmente, cuando ya habían tenido 7 hijos, una medianoche se les apareció el dios Vishnú de cuatro brazos, y les dijo que serían los padres de su encarnación como Krishná. Según la leyenda, Krishná no nació a partir de la conexión sexual entre Devakí y Vasudeva, sino que fue transferido desde el corazón de Vasudeva al útero de Devakí. El bebé apareció ante ellos mágicamente. Ese octavo hijo sólo estuvo un instante en la cárcel: los guardias se durmieron, las puertas de la prisión se abrieron solas, y Vasudeva tomó en brazos al bebé y caminó hasta Gokula, a unas tres horas de camino. Para protegerlo de la lluvia, la serpiente Ananta Sesha (encarnación de Sankarshana) lo cubrió con sus mil caperuzas. Cuando Vasudeva se encontró con el río Yamuná, las aguas se abrieron para él (eso demostraría que en la antigüedad Gokula se encontraba en la ribera izquierda del río Yamuná). En Gokula entró en la casa de Nanda y Yashodá, que se encontraban durmiendo, y dejó a Krishná en reemplazo de Maya hija recién nacida de Yashodá. Volvió a la cárcel en Mathurá, se volvió a encerrar en la mazmorra, y Kamsa vino y tomó a la niña para asesinarla. Devakí le pidió por la vida de ella, indicando que la profecía se refería sólo a sus hijos varones. Pero Yogamaia se escapó de las manos del rey y se convirtió en la diosa de ocho brazos, Durga, que lo espetó: «Estúpido, tu muerte ya ha nacido en este planeta». Y desapareció.
Al darse cuenta de que Krishná había escapado vivo, Kamsa mandó matar a todos los bebés recién nacidos en toda la zona. (Compárese con el mito cristiano de la Matanza de los Inocentes). Devakī y Vasudeva siguieron presos hasta que Krishná los liberó 16 años más tarde, al matar al rey Kamsa. En total estuvieron presos unos 24 años.
Según otro autor[cita requerida] Kamsa liberó a Devaki y Vasudeva, y ellos vivieron en Mathurā.
Luego de ser liberado, Vasudeva se juntó con su segunda esposa Rohini, con quien tuvo una hija, Subhadrā, quien se casaría con Áryuna (el amigo de Krishná) y fue la madre de Abhimaniu. Luego, tras los ataques del rey Jarasandha a Mathurá y la incapacidad de Krishná para defender a sus habitantes, todos emigraron a Dwaraka, donde vivieron el resto de sus días.

domingo, 12 de junio de 2011

LA "LECHE DORADA" AYURVÉDICA.


Leche dorada.
Propiedades: Esta deliciosa bebida caliente es para la columna. lubrica las articulaciones y ayuda a eliminar los depósitos de calcio.
Ingredientes:
1/8 cdita de cúrcuma
1 tza de leche
1/4 tza de agua
2 cdas de aceite de almendras crudo
Miel a gusto
Preparación:
Hierva la cúrcuma en agua durante 8 min hasta que se forme una pasta espesa. Si se evapora mucha agua, agregue algo más. Calienta la leche y dale un hervor con el aceite de almendras. Sacar del fuego y combinar las 2 mezclas agregando miel.
Para variar la receta, puedes batir la leche dorada hasta que quede espumosa y luego añadirle canela en polvo.

Mi experiencia personal con esta receta fue muy buena a la par que sorprendente, ya que sufría dolores en una de mis caderas y aveces tenía dolor en las rodillas de pasar mucho tiempo sentada en posura de medio loto impartiendo las clases de yoga.
Estuve tomando leche dorada durante una semana, todos los días por la noche, y se me quitaron los dolores.

¡OJO!: Es muy importante que la cúrcuma sea cocída antes de su consumo.
También la puedes tomar con yougurt en lugar de leche.


EL INCULTO BARQUERO (Cuento clásico de la India)

 
  Se trataba de un joven erudito, arrogante y engreído. Para cruzar un caudaloso río de una a otra orilla tomó una barca. Silente y sumiso, el barquero comenzó a remar con diligencia. De repente, una bandada de aves surcó el cielo y el joven preguntó al barquero:
  --Buen hombre, ¿has estudiado la vida de las aves?
  --No, señor -repuso el barquero.
  --Entonces, amigo, has perdido la cuarta parte de tu vida.
  Pasados unos minutos, la barca se deslizó junto a unas exóticas plantas que flotaban en las aguas del río. El joven preguntó al barquero:
  --Dime, barquero, ¿has estudiado botánica?
  --No, señor, no sé nada de plantas.
  --Pues debo decirte que has perdido la mitad de tu vida -comentó el petulante joven.
  El barquero seguía remando pacientemente. El sol del mediodía se reflejaba luminosamente sobre las aguas del río. Entonces el joven preguntó:
  --Sin duda, barquero, llevas muchos años deslizándote por las aguas.
?Sabes, por cierto, algo de la naturaleza del agua?
  --No, señor, nada sé al respecto.
No sé nada de estas aguas ni de otras.
  --¡Oh, amigo! -exclamó el joven-.
De verdad que has perdido las tres cuartas partes de tu vida.
  Súbitamente, la barca comenzó a hacer agua. No había forma de achicar tanta agua y la barca comenzó a hundirse. El barquero preguntó al joven:
  --Señor, ¿sabes nadar?
  --No -repuso el joven.
  --Pues me temo, señor, que has perdido toda tu vida.

jueves, 9 de junio de 2011

LA ELOCUENCIA DEL SILENCIO (Cuento clásico de la India)

 
  Un padre deseaba para sus dos hijos la mejor formación mística posible.
Por ese motivo, los envió a adiestrarse espiritualmente con un reputado maestro de la filosofía vedanta. Después de un año, los hijos regresaron al hogar paterno. El padre preguntó a uno de ellos sobre el Brahmán, y el hijo se extendió sobre la Deidad haciendo todo tipo de ilustradas referencias a las escrituras, textos filosóficos y enseñanzas metafísicas. Después, el padre preguntó sobre el Brahmán al otro hijo, y éste se limitó a guardar silencio.
Entonces el padre, dirigiéndose a este último, declaró:
  --Hijo, tú sí que sabes realmente lo que es el Brahmán.
 
 
  *El Maestro dice: La palabra es limitada y no puede nombrar lo innombrable.

lunes, 6 de junio de 2011

MEDITACIÓN PARA RESOLVER LOS CONFLICTOS INTERNOS

POSTURA:
Siéntate en postura fácil o en una silla, con la espalda recta.
Coloca las manos sobre cada uno de tus pechos, por encima de los pezones. Los dedos apuntan unos hacia otros.


CONCENTRACIÓN:
Ojos cerrados y dirigidos al punto del tercer ojo.

RESPIRACIÓN:
Inspira lenta y profundamente durante 5 segundos.
Espira completamente durante 5 segundos.
Retén el aire fuera durante 15 segundos mientras que suspendes el movimiento del tórax y contraes el ombligo y el abdomen.

TIEMPO: 11 minutos.

FINAL: Inspira profundamente y estira los brazos hacia arriba, espira y sacude los brazos con fuerza de 15 a 30 segundos.

COMENTARIO:
Cuando estamos confundidos y paralizados por el conflicto interno, esto bloquea nuestra capacidad de actuar y pensar con claridad. Es en esta clase de momentos cuando la energía de la mente no se encuentra equilibrada. Al aguantar la respiración fuera 3 veces más de lo que está dentro, hace que el cuerpo note una falta de prana en las áreas vitales de funcionamiento y el cuerpo se pregunta como puede reorganizarse rápida y óptimamente ante la amenaza de su supervivencia. Las fibras del cuerpo pránico se extienden y se recanalizan para crear un nuevo patrón de prana repleto de claridad, pensamiento y acción.

sábado, 4 de junio de 2011

SOY TÚ (Cuento Clásico de la India)

 
  Era un discípulo honesto. Moraba en su corazón el afán de perfeccionamiento. Un anochecer, cuando las chicharras quebraban el silencio de la tarde, acudió a la modesta casita de un yogui y llamó a la puerta.
  --¿Quién es? -preguntó el yogui.
  --Soy yo, respetado maestro. He venido para que me proporciones instrucción espiritual.
  --No estás lo suficientemente maduro -replicó el yogui sin abrir la puerta-. Retírate un año a una cueva y medita. Medita sin descanso.
Luego, regresa y te daré instrucción.   Al principio, el discípulo se desanimó, pero era un verdadero buscador, de esos que no ceden en su empeño y rastrean la verdad aun a riesgo de su vida. Así que obedeció al yogui.
Buscó una cueva en la falda de la montaña y durante un año se sumió en meditación profunda. Aprendió a estar consigo mismo; se ejercitó en el Ser.
  Sobrevinieron las lluvias del monzón. Por ellas supo el discípulo que había transcurrido un año desde que llegara a la cueva. Abandonó la misma y se puso en marcha hacia la casita del maestro. Llamó a la puerta.
  --¿Quién es? -preguntó el yogui.
  --Soy tú -repuso el discípulo.
  --Si es así -dijo el yogui-, entra. No había lugar en esta casa para dos yoes.
 
  *El Maestro dice: Más allá de la mente y el pensamiento está el Ser.
Y en el Ser todos los seres.

viernes, 3 de junio de 2011

TIPOS DE SADHU

Hay distintas doctrinas y órdenes, según la divinidad que centre su atención y otras costumbres. Algunos de los “tipos” de sadhus son:

 

Naga Sadhus:

Dicen que su origen se pierde en la noche de los tiempos y que ya existían en la prehistoria.
Desnudos y con el cuerpo embadurnado de vibhuti, o ceniza sagrada, los naga sadhus constituyen una de las sectas hindúes más curiosas y menos conocidas. Se dice que pasan la mayor parte de sus vidas en pleno Himalaya, donde viven al margen de la sociedad desde el momento en que deciden convertirse en ascetas.
 Suelen tener un aspecto agresivo e imponente. Destacan por su aspecto robusto, por ir prácticamente desnudos (eso significa “naga”) y sus barbas y melenas enmarañadas.  En origen eran guerreros que defendían a los hindúes de la invasión musulmana.
Algunos de ellos fueron entregados por sus padres a un gurú que, tras adoctrinarles y utilizarles como esclavos durante años, les permitió convertirse a su vez en maestros. Otros por sí mismos decidieron abandonar el mundo material y renacer en el espiritual. Tanto es así, que los hay que celebran su propio funeral y se deshacen de todos sus bienes y documentos. El Estado indio, que reconoce la muerte legal –aunque no física- de los sadhus, dejará en ese momento de considerarles ciudadanos de este mundo. Ha muerto un hombre y ha nacido un sadhu.
A partir de la conversión, el naga sadhu consagrará su existencia a adorar a Shiva, a meditar y a perfeccionarse como guerrero asceta. El celibato, más fácil de llevar gracias a las pipas de hachís que fuman continuamente, les servirá para concentrar su energía y buscar la 'iluminación'. Para un naga sadhu, tener un hijo supondría una catástrofe, pues alargaría el ciclo de reencarnaciones del que quieren escapar.
Como buenos guerreros de Shiva, los naga se organizan en akharas, equivalentes a regimientos que siguen las órdenes de un jefe. En las celebraciones religiosas masivas -como el Kumbha Mela- se producen a veces verdaderas batallas campales entre sectas o facciones de sadhus, y es entonces cuando entran en acción las espadas, las lanzas o los tridentes que normalmente portan sólo como símbolos religiosos.
La organización dentro de la secta es extremadamente rígida y tiene forma piramidal, aunque han surgido escisiones en el seno de los naga que han dado lugar a nuevas sectas. Los aproximadamente 250.000 sadhus que tiene la secta Juna, por ejemplo, sólo prestan obediencia ciega a Soham Baba, su mahamandalesvara, o gran jefe, y son capaces de pelear hasta la muerte contra los seguidores de una secta rival.
"Es un mundo complejo, muy primitivo y poco conocido. Los naga siempre han despertado entre la gente una mezcla de fascinación y temor, y todavía hay quien piensa que efectivamente son muertos cuyo cuerpo está ocupado por el espíritu de Shiva y, como tales, hay que respetarlos", dice el antropólogo indio Anil Bhose.
Las historias sobre los sadhus centenarios que subsisten en los profundos bosques del Himalaya practicando el yoga y ayunando durante meses pueden ser sólo leyenda. Pero se sabe que el carácter guerrero de los nagas les llevó a plantar batalla a los musulmanes que invadieron la India en el siglo XII, y más tarde a los británicos. Con su empeño por mantenerse al margen de la sociedad y del mundo material, se diría que los naga sadhus están resistiéndose a perder la guerra contra una nueva invasión: la de la modernidad.

Dandis

 Son de origen brahman y grandes sabios. Se dedican a la meditación y conocen muy bien las escrituras. Suelen ir ataviados de un “danda”, un cayado de bambú del que no pueden separarse.

Aghoris

 A diferencia del resto de órdenes sadhus, los aghoris no evitan el contacto con todo lo considerado impuro, sino que lo han convertido en su razón de ser.
Los Aghori son una secta Hindú, que se ubican en la India, Nepal y Sudeste de Asia. Ellos sostienen que las personas que practican el canibalismo tienen poderes mágicos, vida eterna, y pueden relevar el dolor. Muchos hindúes los califican como “no hindúes” por tener rituales de canibalismo. Sin embargo, los Aghoris, a diferencia de otros grupos que practican el canibalismo, no matan humanos para comer, sino que comen carne humana de personas ya fallecidas. Por esto, a los Aghoris se los tilda de inofensivos.

El término sánscrito Aghora es la combinación entre dos palabras y tiene distintos significados: A es una negación; Ghora es la oscuridad de la ignorancia, pero también significa intenso, profundo. Aghora significa, por lo tanto, la luz, la ausencia de la oscuridad, la toma de conciencia, pero también simboliza un estilo de vida donde un discípulo de la tradición de Aghori no tiene sentimientos intensos o profundos, no hace diferencia entre los diversos sentimientos, parece ser indiferentes a las diversas historias de la vida.

Los Aghoris siguen a Lord Shiva y otros a Lord Kali (Kali es el nombre de su divina madre con quien se mantienen en contacto mediante rituales con cadáveres humanos, los cuales son tan sagrados como cualquier otra cosa en sus vidas) y sostienen que pueden parar el renacimiento humano en la tierra.
Los principios rectores para un sadhu son la renuncia y la disciplina. Han sacrificado toda su vida material, su familia, los placeres de la vida, para dedicarse por completo a la práctica de lo sagrado: el yoga y el control de su propio cuerpo, la meditación, rituales de distinto tipo, penitencias (en algunos casos de lo más excéntrico)…
Por eso el verdadero sadhu es considerado un hombre santo y despierta todo el respeto y la admiración en India, lo que permite que puedan vivir de la limosna.

No obstante, hay excepciones. A veces no son más que vagabundos o personas que malviven en la calle… y en algún caso es posible encontrar a quien encubre otro tipo de propósitos o prácticas bajo la apariencia de “sadhu”, como disfrazarse de atracción turística para conseguir unas rupias



Sadhvis: las mujeres santas de la India


Al contrario que muchos Sādhus, jóvenes y de sexo masculino, las
mujeres jóvenes y hermosas no suelen verse en comunidad. Cerca del
diez por ciento de los Sādhus son mujeres, llamadas sadhvis, pero la
mayor parte de ellas son de avanzada edad, pues se convirtien en sadhvis
después de enviudar.
Esto refleja la posición de la mujer, generalmente subordinada en la
sociedad india e incluso la posición más marginal aún de las viudas -- la
creencia popular es que las mujeres tienen que nacer otra vez como
hombres antes de que puedan liberarse espiritualmente.
Sobhna Giri pertenece al Juna Akhara. Se incorporó a la vida de
Sādhu siendo aún una niña y comprometiendose de esta forma
para siempre con el celibato y otras prácticas ascéticas.
Sadhvis de Juna Akhara
Elegir la vida de Sādhu era -- y es
todavía -- casi la única manera
respetable de escapar a la “muerte en
vida” de la viudez.
Sin embargo, desde tiempos
inmemoriales siempre ha habido Sādhus
femeninas. Y, como los hombres,
algunas han elegido la vida de Sādhu en
sus adolescencias, convencidas como
estaban de su predestinación espiritual.
Muchas sectas no admiten a mujeres porque los célibes temen sus “influencias corruptoras”; algunas sectas son
mixtas, pero en ese caso las mujeres Sādhus viven en espacios separados; en algunas subsectas de menor
importancia todas son mujeres.
Aunque en términos generales su posición en la jerarquía espiritual es inferior a la de los hombres, ha habido siempre
grandes santas y las mujeres Sādhus se tratan con mucho respecto -- por ejemplo se dirijen a ellas como “Mataji,”
“venerable madre”.
Mahadevi
Hace tiempo, las sadhvis
también vagaban desnudas.
Una famosa santa - y poetisa
- que vivió en el siglo XII,
vagaba cubierta únicamente
con sus largas trenzas.
Mahadevi (gran diosa) tal
como la llamaron, o Akka
(hermana mayor) se enamoró
de Śiva.
A losdiez años, la iniciaron en
la adoración de Śiva, que ella
llamaba “el Señor Blanco
como el jazmín”. Permaneció
vagando, como una mujer
salvaje, como una diosa
intoxicada, buscando por
todas partes su amante
divino.
La desnudez ritual debió haber sido rara en los días de Mahadevi,
pues provocaba atenciones incómodas de los hombres, que de vez
en cuando intentaban molestarla.
Pero la práctica no desapareción nunca completamente. Hace cien
años, el antropólogo John Omán se encontró con una Sadhvi
desnuda.