sábado, 24 de octubre de 2015

La mente neutral y su aplicación en la vida diaria.

A la hora de meditar podemos distinguir tres aspectos mentales:

-La mente positiva
-La mente negativa
-La mente neutral

La mente positiva es la que suma las ventajas de tus acciones y te anima en la propia acción.
La mente negativa suma las desventajas y te advierte de peligros, no es que sea negativa en sí.
Y la mente neutral es la que equilibra a la mente positiva y a la negativa.

Este estado de neutralidad es tratado en el Tao Te Ching, hablando de la permanencia constante en un punto central tanto en nuestra manera de pensar como de actuar, ¿Por qué? porque los extremos finalmente llevan al enfrentamiento y más tarde al sufrimiento.

Es muy difícil permanecer en la neutralidad todo el tiempo, pero se puede practicar un modo de vida que te mantenga en la neutralidad, intentando no ir hacia los extremos, respetar las opiniones de los demás sin tener la última palabra, trabajar la justicia, hablar cuando se tiene que hablar y callar cuando hay que hacerlo. En cuanto a los sentimientos, es un poco más difícil, pero con la meditación, cualquiera que practiques te mantendrá en ese estado. 

Cuando se trabaja la mente neutral se fortalece la intuición, porque nos dedicamos más a observar nuestro ambiente y lo que nos rodea, estudiamos sin darnos cuenta, las situaciones y comportamientos de los demás y en base a eso actuamos.

Ser neutral no quiere decir permanecer tranquilo, sin hacer nada y no entrar en conflictos. No es mantenerse al margen, es saber hacer las cosas cuando hay que hacerlas de un modo justo y lo menos dañino para el resto. En eso se basa por ejemplo la filosofía del Aikido, un arte marcial que se basa en el amor y en el respeto por el adversario, al cual evitan llamar enemigo, porque eso implicaría odio. Cuando existe un enfrentamiento, en aikido se tiende a desmontar o desarmar al contrincante intentando infligir el menor daño posible, ya que tu adversario te está dando la oportunidad de aprender una lección. Quizás deberíamos ver así la vida, personas con las que podamos tener un conflicto, pero que no son enemigos. 

Saber perdonar y pedir perdón también es un modo de neutralidad porque borras el conflicto para regresar a un punto de partida neutral antes de que se generara. 

La neutralidad se consigue frenando los pensamientos extremos, controlando la respiración, respetando a cada persona de manera individual y no juzgarla por un colectivo x, etc. ¿Es fácil? No os engañaré, es muy difícil, ¡pero funciona!


lunes, 12 de octubre de 2015

El Chakra Soma



Justo encima del paladar hay un chakra menor llamado Soma o Indu. 

Este es el centro de energía vinculado a la serena energía de la luna y la meditación de este chakra te ayuda a liberar tensión y ansiedad, calmar la ira y experimentar una sensación de tranquilidad y felicidad. 
Al trabajar con este chakra también adquieres la habilidad de controlar los elementos relacionados con los chakras.

Este chakra se estimula inspirando por la narina izquierda o con el Nasagra drishti, dirigiendo ambos ojos hacia la nariz. Puedes ubicarlo centrando la atención justo dentro el arco interior de la ceja izquierda. 
Visualízalo como un loto etéreo y níveo de 16 pétalos.

Se dice que este chakra es la fuente del néctar divino de la inmortalidad que tiene la capacidad de eliminar impurezas. Se cree que el néctar de energía rezuma de la "cueva" o espacio hueco entre los hemisferios cerebrales. (Probablemente se refiera al líquido encéfalo-raquídeo). La mayoría del tiempo, este néctar que conserva la juventud, fluye hacia abajo por el chakra soma y los otros centros de energía inferiores hasta el plexo solar , donde es quemado por el fuego de manipura. El resultado es que tu energía juvenil se disipa continuamente en este proceso.

Una de las maneras de bloquear esta pérdida de energía descendente, es practicar la postura restauradore Viparita Karani o postura pélvica.



Varias escrituras yóguica afirman que si eres capaz de detener el fluido descendente de néctar divino permanecerás joven para siempre, lleno de vitalidad y resistencia. Tal vez se refieran a una manera simbólica de referirse a la juventud.

Por otro lado, en el Gheranda Samhita, se habla de otra técnica para estimular este chakra que consiste en presionar el paladar con la lengua. 




Halasana o postura del arado


Esta es una de la posturas más exigentes  que hay en yoga, bajo mi punto de vista. 

¿Cómo se forma esta asana?
Túmbate boca arriba, lleva las rodillas al pecho, coloca los brazos estirados a lo largo del cuerpo y comienza a despegar los glúteos y las lumbares del suelo, estirando las piernas, como si fueses a hacer la postura de la vela o salamba sarvangasana, pero en lugar de estirar las piernas hacia arriba, lo vas haciendo hacia atrás, por encima de tu cabeza. 

Dependiendo del equilibrio y la flexibilidad que tengas, hay diferentes maneras de colocar los brazos en esta postura.
Si eres principiante se aconseja sujetar tus lumbares con las manos.
En caso de que no puedas estirar del todo las piernas o llevar los pies hasta el suelo, dejas los pies elevados y las rodillas un poquito dobladas hacia la cara.


Si tienes más elasticidad, puede agarrarte los dedos de los pies con las manos.

Hay una tercera variante, que sería el ejercicio en ideal, que consiste en estirar los brazo y entrelazar las manos, de tal manera que estas quedan colocados en dirección contraria a la cabeza.


Postura facilitadora:

Si estás muy incómodo en la postura y quieres ir aprendiéndola poco a poco y sin hacer grandes esfuerzos, puedes colocar los pies encima de una silla. 

Fijaos en que también podéis colocar un par de mantas dobladas bajo vuestros hombros para no haceros daño, la cabeza, sin embargo, siempre ha de estar apoyada en el suelo.


Beneficios de la asana:

-Estiramiento de los sóleos, los gemelos, los isquiotibiales, el nervio ciático, los extensores de la columna y los triceps si haces la postura en ideal.

-Abre el cuello y los hombros.

-Al presionar el abdomen, se masajéan los órganos digestivos, mejorando así su desintoxicación, por el fluir de la sangre hacia ellos.

-Estimula la glándula tiróides, ayuda a eliminar flemas y mucosidad y regula la respiración.

-Su práctica constante ayuda a calmar y restaurar el sistema nervioso simpático y mejora la memoria y la concentración, debido al estímulo del líquido espinal hacia el cerebro.

-Alivia el estrés y la fatiga.

-También ayuda con los dolores de cabeza, ya que la postura incrementa la sangre hacia esa zona, la infertilidad y el insomnio. 



Contraindicaciones:

Si tienes problemas como lumbalgias o hernias discales, se recomienda mejor hacer la postura de la pinza o paschimottanasana con ayuda de una cinta.



O simplemente tumbarte en el suelo llevar las piernas al pecho en la postura de apanasana y estirar desde ahí las lumbares. 






domingo, 11 de octubre de 2015

Avanzando por el camino del yoga.


Cuando entré por primera vez a una clase de yoga fue de kundalini.
Mi maestro, Jai Dev Singh, llevaba turbante y barba. Mostraba las posturas y después nos observaba y controlaba el tiempo de cada asana. Daba unas explicaciones excelentes sobre los beneficios de cada ejercicio y la verdad es que era muy buen maestro. No me cabe la menor duda de que lo sigue siendo.

Yo me enamoré del kundalini yoga especialmente por los mantras, en mi familia somos muy cantarines, hay varios músicos y cuando mi madre me llevó al centro cultural de mi barrio para que conociera ese tipo de yoga la verdad es que aluciné. Yo solo tenía quince años, y el hacer ciertas posturas no me costaba tanto, lo que más me suponía una dificultad era meditar, pero con el tiempo y la práctica lo fui consiguiendo y lo noté muchísimo en mi vida diaria.

Después de hacerme profesora de kundalini, y llevar once años dando clases, aprendes muchas cosas en la práctica. Tampoco he dejado de estudiar más a cerca del yoga en general. Mi segunda maestra, Hari Simran Kaur siempre me insistía y me insiste en que nunca deje de estudiar, aprender, descubrir, y esto me ha ayudado a darme cuenta de muchas cosas dentro del camino del yoga, entre ellas, que el kundalini yoga es tan específico, avanzado y especial que no todo el mundo está preparado para practicarlo y entender su filosofía.

El propio maestro Yogui Bhajan (Har Bhajan Singh Kalsha), practicó hata yoga durante doce años antes de adentrarse en el mundo del kundalini.

El hata yoga es importante que lo practiquen las personas que les cuesta concentrarse, que viven de manera más terrenal, que necesitan preparar su cuerpo antes de empezar a despertar energías y practicar pranayamas (respiraciones) avanzados. Esto no quiere decir que no puedas ir introduciéndoles poco a poco en las técnicas de kundalini.

Durante todo este tiempo, me he encontrado a algunas personas que renegaban del kundalini porque ya estaban cómodas haciendo hata y no les gustaba nada la meditación. Les sorprendía también que  los ejercicios fueran en movimiento, a diferencia de las asanas del hata, que son estáticas. Bueno, todo tiene su porqué.

El hata es estático, precisamente porque al tiempo que estiras y fortaleces tus músculos, permaneces en una quietud física para transmitirla también a tu mente y llegar a concentrarte solo en ti mismo, sumergiéndote en un estado de concentración absoluta donde los pensamientos paran de golpe. ¿Has probado a hacer la postura del árbol? ¡Es prácticamente imposible pensar en nada! Tienes que estar pendiente en todo momento de no caerte y mantener tu equilibrio sobre un pie. Si no eres capaz de dominar tu cuerpo en equilibrio ¿Cómo vas a ser capaz de dominar tu mente?

Una vez que aprendes poco a poco a dominar todas esas asanas y llegar a meditar en cada una de ellas, dominando tu respiración, puedes seguir avanzando con pranayamas más energéticos y finalmente con kriyas de kundalini yoga, en las que te moverás como nunca lo has hecho haciendo que tu prana circule por tus nadis, desbloqueándolos y preparandolos para poder despertar la kundalini.

En kundalini yoga se le da mucha importancia a los ejercicios de espalda, pues hay que preparar a la columna vertebral y a la médula espinal para el despertar de la energía. Se practican ejercicios para los tres nadis principales que recorren la espalda, Ida, Pingala y Sushumna. 

Quizás lo que más echa para atrás a la gente cuando hacen por primera vez kundalini yoga son los mantras que se cantan al principio y al final de la clase, e incluso durante.
Si es cierto que la estructura de una clase de kundalini es muy ritualista, pero es necesario pues tras el canto inicial dejas todos tus problemas fuera de ti y tras el canto final, te despides de ese momento que has disfrutado para estar contigo mismo y enfrentarte a lo que te queda de día.

Es un poco como la ceremonia del té y sus diferentes fases, al principio recorren un jardín por un caminito empedrado hasta entrar en la sala de ceremonias, dejando atrás todo lo que uno es, y finalmente saliendo de nuevo, al mundo real, tras haber compartido el té con todos los invitados, de una misma taza, para unirte con ellos, y después tomar un té individual en la fase final, para reconocer que seguimos siendo seres individuales de cara al exterior. 

Con esto quiero decir que al principio yo me agobiaba mucho dando kundalini yoga porque pretendía que le gustara a todo el mundo y que entendieran lo que era realmente. Pero también hay que comprender, que hay gente que no está preparada y hay que enseñarles poco a poco, desde el principio, una técnica más sencilla para que logren entender la avanzada. Es como si quisieras enseñar a multiplicar antes que a sumar.

Así es como he entendido que todo tiene su momento y sus ritmos, no hay que agobiar a nadie con nada ni volverse un maestro filosófico cuando en realidad la gente acude a una clase de yoga a evadirse, a que le corrijas, le alientes, de digas "sigue así, lo estás consiguiendo" y finalmente "relájate y vete a casa". Cuando su curiosidad hacia el yoga despierte, preguntarán y entonces sabrás que es el momento de que tus alumnos sigan avanzando por el camino del yoga.


sábado, 10 de octubre de 2015

Adho Mukha Svanasana El perro boca abajo (El triángulo, la montaña o el perro boca bajo






Esta es una de las posturas más conocidas del yoga porque forma parte de la serie de Surya Namaskar, en saludo al sol.

La puedes formar desde la postura de la vaca (en cuadrupedia, a cuatro patas) y desde ahí ir subiendo los glúteos tan alto como puedas.

Has de distribuir equitativamente el peso entre tus manos y tus pies. Ojo con no llevar excesivo peso hacia las manos, porque cargarás las muñecas y sentirás dolor.

La postura en ideal requiere que apoyes completamente los pies en el suelo, desde los dedos al talón, pero si tienes acortamiento isquiotibial, te tira mucho por detrás de la pierna y no puedes estirar del todo las rodillas, no pasa nada, mantén los talones arriba y las piernas semi-flexionadas, hasta que con la práctica logres que los músculos de la pierna se vayan estirando poco a poco.

También puedes colocar un ladrillo de corcho o una mantita doblada debajo de los talones para que te cueste menos mantener la postura.

Adho Mukha svanasana ayuda a estirar el nervio ciático, los isquiotibiales, ayuda a fortalecer los brazos, a colocar correctamente y de manera alineada la cintura escapular y a nivel interno es muy buena para la circulación, especialmente hacia la cabeza y para combatir el estreñimiento.

Contraindicaciones:

Si tienes la tensión alta no se recomienda hacer posturas invertidas donde se aumente el flujo hacia la cabeza, así que se aconseja practicarla durante unos segundos, entre 15 y 30.

Si sufres desprendimiento de retina no se aconseja practicar esta asana.

Si te duelen mucho las muñecas o tienes problemas de túnel carpiano, puedes modificar la postura apoyando los antebrazos en el suelo, de la mano hasta el codo.



miércoles, 7 de octubre de 2015

Chakra de la tortuga

Debajo del chakra de la garganta y encima del chakra del corazón hay un chakra menor con un patrón de energía radiante que se asemeja a una tortuga, o kurma en sánscrito. La meditación en este centro de energía aporta calma que a veces se aproxima a la paz de la hibernación.
La tortuga es el símbolo universal de estabilidad y resolución firme. Una vez decide esconder la cabeza y las patas, nadie ni nada le puede hacer cambiar de opinión. En la mitología hindú es una tortuga la que aguanta el universo. Sus cuatro patas, la cabeza y la cola pueden ser una analogía de los cinco sentidos más la mente. La capacidad de la tortuga para ocultar sus extremidades y estar en paz consigo misma es un símbolo de la práctica de pratyahara en el yoga. Aunque suele traducirse como "retirada de los sentidos", esta práctica se describe mejor como la retirada de la energía mental de los sentidos.
Los sentidos son como aparatos eléctricos que sólo funcionan cuando se enchufan a una fuente de energía. Si, por ejemplo, estás absorto en un libro, quizás no oigas el teléfono: a tus oídos no les pasa nada, pero tu energía mental está siendo canalizada hacia tus ojos. En el pratyahara "desconectas" adrede tus sentidos de su fuente de energía. Cuando te sientes para iniciar la meditación, intenta desconectar los sentidos. No dejes que la energía viaje de tu mente a tus ojos, nariz, oídos, piel o boca, ni a tus manos ni pies (la palabra sánscrita para los sentidos incluye a los órganos de la acción). Esto significa que dejas de ver, oler, oír, palpar, moverte o trabajar. Cuando la energía mental ya no escapa, estás practicando pratyahara y asumes las cualidades de la firme y tranquila tortuga.

"Con la concentración firme en la tortuga sita en el hoyo de la garganta se consigue la calma total de cuerpo y mente".
Patanjali. Sutras de Raja Yoga, 3.31